Lo mejor sobre la after-party de la Gala MET no fueron los vestidos (ya que todo el mundo está bastante cambiado con sus mejores galas) o conocer gente famosa (ya que cuando has hecho esto alguna que otra vez, te das cuenta que no es divertido conocer gente que no te quiere conocer). No, lo verdaderamente divertido es dar un paso hacia atrás y observar cómo los famosos interactúan entre sí.
Lo mejor sobre la after-party de la Gala MET no fueron los vestidos (ya que todo el mundo está bastante cambiado con sus mejores galas) o conocer gente famosa (ya que cuando has hecho esto alguna que otra vez, te das cuenta que no es divertido conocer gente que no te quiere conocer). No, lo verdaderamente divertido es dar un paso hacia atrás y observar cómo los famosos interactúan entre sí.
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La after-party de Alexander Wang y Lady Gaga prometía ser desde el principio una gran aventura. Para media noche ella llegó a la avenida muy "Gaga-Wang", el Diamond Horseshoe, la casa de las cenas-espectáculo extravagantes del teatro Queen of the Night. Lady Gaga se retiró su abrigo Balenciaga de plumas negras y corrió por toda la fiesta, seguida de cerca por dos guardaespaldas, con una tiara y enfundada en un mono de lentejuelas y plataformas altas.
Wang, por su parte, llevó de la mano a otras de sus estrellas invitadas de la noche, Miley Cyrus, todavía con sus abalorios de cuello alto y envuelta en un vestido que dejaba sus caderas al aire. "Ni siquiera puedo ponerme ropa interior con esta cosa", dijo ella anteriormente. Wang la llevó a la pista de baile tan pronto como pusieron "Turn Down for What", donde inmediatamente Cyrus sacó un cigarrillo y se unió a Zoe Kravitz y su madre, Lisa Bonet.
Algunos asistentes a la after party organizada por Lady Gaga y Alexander Wang tras la Gala MET
Posted by Wheresmystache.com on Martes, 5 de mayo de 2015
Bonet, por su parte, casi en ningún momento quitó la mirada de su teléfono, excepto para saludar a Kristen Wiig. ¿Quién sabía que eran amigos? O que Wiig es también amigo de Janelle Monae, quien vino más tarde. Amanda Seyfried, solamente estuvo con algún amigo no famoso en un área apartada, también cayó en la categoría de "adictas al teléfono", incluso cuando su novio Justin Long fue a darle un abrazo.
Ansel Elgort y su novia Violetta Komyshan estuvieron más cerca del "frenesí Gaga", encaramada cerca de la barra libre de botellas, sin apartarse nunca de la gente. Cyrus, por su parte, se retiró a un banco con amigos cercanos de Rita Ora, ahora en pantalones blancos, un cabestro negro y un collar de cristal hecho para que pareciera una serpiente rodeando su cuello. "Hot N*gass" de Bobby Shmurda sonó y Lady Gaga se soltó la melena.
Finalmente llegó la noticia de que Madonna estaba allí, y la mitad de la sala pareció correr tras de ella. Jennifer Lawrence, ahora con un seductor vestido plateado, aprovechó la oportunidad para irse por la puerta de atrás, mientras que Jenna Lyons salía por la parte delantera.